Por: Lalo Porras Ortiz.
LA CHARRERÍA CONTRA EL RODEO.
La charrería y el rodeo americano son dos disciplinas que están estrechamente relacionadas con el mundo de los caballos.
Ambas actividades son una representación conmemorativa del trabajo que nuestros antepasados realizaban en campo abierto.
Aunque sean similares en muchas faenas o actividades, existen algunas diferencias clave entre el rodeo americano y la charrería.
Una de las principales diferencias es el propósito de cada una.
El rodeo americano se basa principalmente en brindar un espectáculo emocionante a las personas.
Sus reglas están diseñadas para ofrecer entretenimiento y exhibir las habilidades de los jinetes y vaqueros.
Por otro lado, la charrería se enfoca en mantener las costumbres y tradiciones de los primeros charros mexicanos.
Aquí el principal objetivo es preservar la cultura y la elegancia en cada una de las faenas.
Otra diferencia notable se encuentra en las reglas y métodos de calificación.
En el rodeo americano, cada disciplina se califica por separado y se premia a los mejores de cada una.
Los auxiliares de cada actividad son los mismos para todos los participantes.
En cambio, en la charrería, todas las faenas se deben realizar por cada equipo y se califican en conjunto. Cada actividad recibe un puntaje que al final se suma para determinar al campeón.
En la charrería, trabajar en equipo es fundamental para poder ganar.
La vestimenta también es una diferencia importante entre el rodeo americano y la charrería.
En el rodeo, no existe una vestimenta en particular y se permiten patrocinios de marcas en el vestuario.
En cambio, en la charrería, es obligatorio vestir de forma tradicional y elegante.
Si no se va vestido correctamente, no se permite la participación.
Aquí no verás patrocinios en los trajes de los charros, ya que se busca mantener la autenticidad y respetar las costumbres.
En cuanto a las actividades específicas, hay algunas que se asemejan tanto en el rodeo americano como en la charrería.
Por ejemplo, el jineteo de broncos se realiza en ambos casos, aunque con algunas variaciones en las reglas.
En el jineteo de yegua, la objetivo es mantenerse en el lomo del animal durante 8 segundos.
En el rodeo americano, el jinete debe permanecer sin tocar al toro con una mano durante el mismo período de tiempo.
Aunque las técnicas son diferentes, el objetivo es el mismo: demostrar habilidad y valentía.
Otra actividad que se encuentra en ambas disciplinas es el lazo.
Tanto en el lazo en parejas como en la terna, se busca lanzar el lazo de forma elegante y rápida.
En el coleo, se debe tomar la cola del toro y ejercer fuerza para desbalancearlo y derribarlo.
En la achatada, se agarra la cabeza del toro y se gira para desestabilizarlo.
En ambas actividades, se busca trabajar en equipo para lograr el objetivo.
La cala de caballo y el raining también son actividades comunes y parecidas en el rodeo americano y la charrería.
En la cala, se deben mostrar habilidades como giros, caminar hacia atrás y detener la carrera del caballo.
En el raining, se realizan las mismas habilidades, pero en una secuencia elegida por el participante.
En ambas disciplinas, se valora la técnica y la elegancia en los movimientos.
En cuanto a los premios, nuevamente hay diferencias entre el rodeo americano y la charrería.
En el rodeo, los premios suelen ser espectaculares y dependiendo de la actividad, pueden llegar a ser muy elevados en términos de dinero.
En la charrería, el principal premio es el reconocimiento de ser el mejor equipo.
Aunque también se entregan trofeos y en algunas ocasiones se dan cantidades de dinero, el objetivo principal no es el premio económico.
En resumen, el rodeo americano y la charrería son dos disciplinas relacionadas con el mundo de los caballos, pero con propósitos y reglas diferentes.
Mientras que el rodeo busca ofrecer un espectáculo emocionante y entretenido, la charrería se enfoca en mantener las tradiciones y costumbres de los charros Mexicanos.
Ambas disciplinas comparten algunas actividades similares, pero cada una tiene su propia forma de calificación y premiación.
Si te interesa este fascinante mundo de los caballos, te invito a que exploras más de cerca en nuestras raíces para estar al día sobre las últimas novedades del rodeo americano y la charrería.
La Escaramuza Charra es el conjunto ecuestre femenino en la charrería mexicana que consiste en evoluciones coreografiadas a caballo con música de fondo.
La escaramuza charra se conforma por ocho integrantes montadas a la inglesa y su presentación consta de 12 ejercicios, los cuales son a alta velocidad, mismos que consisten en hacer cruces y giros, con lo que se demuestra la destreza que tienen las damas para montar y la buena rienda de sus caballos.
Fue hasta la década de los 50 que las mujeres comenzaron a participar en la charrería, dentro de la Asociación Nacional de Charros, la escaramuza charra fue creada por el señor Everardo Camacho y el instructor Luis Ortega en 1953, la cual estaba conformada por niñas y niños pequeños que tenían entre cinco a nueve años de edad.
Esta primera escaramuza fue integrada por los hermanos Guadalupe, Antonio y José Camacho, Luis, Arturo y María Eugenia Ruiz Loredo. Como en ese entonces fue algo innovador, tuvo mucho éxito, ya que en aquella presentación los niños demostraron su destreza al montar a la usanza charra y la educación de sus caballos.
Con su elegancia y valentía, las escaramuzas o mujeres charras de Mexico, de EEUU, Uruguay, Cuba y Peru, pero sobretodo en los 32 Estados de México, y la CdMex, en Chihuahua como en casi ya todo el País, se abren paso con mínimo una escuela que entrena a niñas y adolescentes en la charrería, considerado un deporte nacional usualmente dominado por hombres.
Las escuelas abrieron sus puertas de manera formal a principios de septiembre, el mes de las fiestas patrias de México, y es la primera avalada por el Gobierno estatal en un esfuerzo por inculcar en las más jóvenes el amor por las escaramuzas, una rama de la charrería que es practicada solo por mujeres.
Aunque es una variante de la charrería, las escaramuzas tienen su propia identidad y sus propias suertes o ejercicios que requieren de valentía, un amplio conocimiento de los caballos, habilidad para dirigirlos y mucha coordinación, lo que en otros deportes equinos no los tiene.
Con todos los ejercicios se conforma una rutina que les da puntos en las competencias, pero lo más importante es tener el valor para andar a caballo.
Las chicas ya traen ese amor por los caballos, solo es necesario entrenar la coordinación y estar atentas.
Por último, cabe mencionar que, el rodeo no deja de ser un espectáculo mercantil, la Charrería es un Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad…
Gracias por leerme.
ELRESBALADEROTV
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